Este artículo describe cómo el INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria) en colaboración con productores de Córdoba está implementando herramientas de ganadería de precisión para optimizar la producción bovina.
La tecnología permite a los productores conocer el comportamiento individual de cada animal en un rodeo, lo que les ayuda a aumentar el valor de sus terneros hasta en un 20% en comparación con el precio promedio del mercado.
Una característica clave de este enfoque es la trazabilidad. Investigadores de INTA en Naredo y Anguil están trabajando en la implementación de comederos inteligentes y balanzas de pesada al paso, que proporcionan datos en tiempo real sobre el consumo de alimento y la salud de los animales. Estos comederos, desarrollados por el equipo de INTA Anguil, utilizan dispositivos RFID para identificar a cada animal y registrar su consumo individual, lo que permite detectar patrones de alimentación y problemas de salud tempranamente.
El caso del establecimiento La Tregua de Bovetti, dirigido por Daniel Bovetti, es un ejemplo concreto de cómo estas tecnologías están siendo aplicadas. Bovetti busca agregar valor a su producto a través de la genética y la selección por eficiencia en la conversión de alimento, con la esperanza de aumentar su competitividad en el mercado.
Ricardo Garro, investigador de INTA, enfatiza que la capacidad de monitorear y evaluar el consumo de alimento permitirá a los productores seleccionar los animales más eficientes y maximizar el potencial productivo del sistema. Esto representa una evolución significativa en la ganadería, combinando tecnología y gestión para mejorar la productividad y rentabilidad.