La Asociación de Fábricas Argentinas de Tractores y otros Equipamientos Agrícolas e Industriales (Afat) ha expresado su gran preocupación ante la posible derogación del Certificado de Importación de Bienes de Capital (CIBU), una normativa vigente desde 1994 que restringe la importación de equipos usados.
Esta medida, que se encuentra bajo evaluación por parte del gobierno, podría tener repercusiones significativas en la industria nacional.
Principales Preocupaciones
1. Pérdida de Competitividad
Afat argumenta que la eliminación de las restricciones a la importación afectaría la competitividad de la industria local, lo que podría resultar en:
- Menor demanda interna: La entrada de maquinaria usada podría disminuir la necesidad de productos nacionales.
- Freno en la modernización del parque de maquinaria: La competitividad de los productores locales podría verse comprometida debido al envejecimiento de la maquinaria.
2. Impacto Sanitario
Los fabricantes advierten que la importación de maquinaria usada podría introducir:
- Plagas y enfermedades: Equipos importados pueden traer consigo agentes patógenos que representan un riesgo sanitario para la producción agrícola.
3. Dificultades Estructurales
El sector agrícola ya enfrenta varios desafíos, entre los que se incluyen:
- Altos costos laborales: La presión sobre los costos operativos es considerable.
- Presión impositiva: Altas tasas impositivas que complican la operación de empresas locales.
- Encarecimiento de insumos importados: La fluctuación de precios agrava la situación financiera del sector.
4. Estado del Parque de Maquinaria
Afat destaca que el 80% de los tractores tiene más de 15 años y el 80% de las cosechadoras superan la década en uso. La posible liberalización de importaciones de maquinaria usada podría:
- Agravar la antigüedad del parque: Perpetuar el uso de equipos viejos en lugar de fomentar la renovación tecnológica.
Declaración de Afat
La entidad ha declarado que “pensar en medidas que favorezcan la importación de usados es mirar hacia el pasado en lugar de mirar hacia el futuro”. Esto refleja su inquietud por los efectos adversos que dicha medida podría acarrear para el desarrollo tecnológico y la productividad del sector agrícola.
Impacto en la Industria
Las compañías asociadas a Afat poseen 12 plantas industriales con más de 500.000 m² de superficie fabril, generando cerca de 16.700 empleos. En 2024, representaron:
- 82% de los patentamientos de tractores.
- 97% de las cosechadoras.
- 100% de las picadoras de forraje.
- 48% de pulverizadoras.
Conclusión
La derogación del CIBU, según Afat, no solo representaría un riesgo para la competitividad del sector agrícola argentino, sino que también podría poner en peligro la sanidad de la producción agrícola. La asociación exhorta a las autoridades a considerar las consecuencias a largo plazo de tales decisiones y a priorizar el desarrollo de la industria local.