Este informe de la Red de Nutrición de Cultivos del NEA (RNCNA) proporciona información crucial para la correcta nutrición de maíz en el noreste argentino, donde el nitrógeno es un nutriente esencial pero limitado. Destaca la importancia de evaluar el potencial del ambiente para optimizar el uso de este recurso.
Umbrales críticos de nitrógeno: Los valores propuestos para la región indican que se necesita un mínimo de 150 kg N/ha (sin considerar la mineralización del nitrógeno) y hasta 298 kg N/ha si se incluye el aporte de N mineralizado. El informe ajusta estos valores según tres tipos de ambientes productivos, considerando factores como la capacidad de rendimiento (rendimientos bajos, medios y altos), con umbrales críticos de nitrógeno que oscilan entre 138 y 311 kg N/ha, dependiendo del tipo de fertilización y de la mineralización del nitrógeno.
Variables que determinan el potencial del ambiente: Un factor clave es la materia orgánica del suelo. En suelos con niveles de MO entre 2,9% y 4%, se observan rendimientos superiores a 9000 kg/ha. Además, los suelos con más arcilla y una historia prolongada de agricultura suelen presentar un rendimiento más bajo debido a la baja disponibilidad de nutrientes.
Cálculo de la dosis óptima económica (DOE): El informe introduce una herramienta para calcular la dosis óptima de fertilización en función de la relación de precios entre el maíz y el fertilizante nitrogenado. Para ambientes con rendimientos bajos, la DOE es de 50 kg N/ha, mientras que para ambientes de rendimiento medio y alto, la DOE es de 59 y 77 kg N/ha, respectivamente. Los productores deben hacer análisis de suelo y ajustar las dosis según los valores óptimos presentados en el informe y la relación de precios actual.
En resumen, este informe propone un enfoque práctico y ajustado a las condiciones locales, integrando variables ambientales, de manejo y económicas para maximizar los rendimientos del cultivo de maíz.