La industria frigorífica argentina ha enfrentado una nueva caída en su actividad durante febrero, con una faena de 1,025 millones de cabezas de ganado, lo que significa un descenso del 2,3% en comparación con enero y un 2,8% respecto al mismo mes del año anterior, según el informe de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes y Derivados de Argentina (Ciccra).
Este descenso en la faena se debe, en parte, a una menor participación de hembras en el total sacrificado, que se ubicó en un 47%. Aunque este porcentaje es levemente inferior al de febrero de 2024, sigue superando el límite del 45% necesario para mantener el stock bovino. Dentro de la categoría de hembras, la faena de vacas disminuyó un 18,2% interanual, mientras que la de vaquillonas vio un aumento del 7,7%, alcanzando 313,87 mil cabezas.
La situación del rodeo argentino es preocupante. Después de la pérdida de 12 millones de cabezas de ganado durante años de intervencionismo y la reciente sequía de 2023, la recuperación apenas ha alcanzado 3,5 millones de cabezas. Este alto porcentaje de hembras en la faena plantea interrogantes sobre la sostenibilidad del stock bovino a mediano plazo.
En términos de producción, febrero cerró con un total de 235,000 toneladas de carne res con hueso, lo que representa una caída del 3,3% en comparación con enero. Este retroceso es atribuido a la menor cantidad de animales sacrificados y a una reducción en el peso promedio en gancho, que se situó en 229 kilos, con una baja del 0,9% mensual.
En cuanto a los precios, el mercado ha experimentado un aumento en el precio de la carne vacuna, lo que ha contribuido a la inflación. El índice de Precios al Consumidor del Gran Buenos Aires (IPC-GBA) mostró un incremento del 2,2% en febrero, impulsado por un aumento del 12,1% en el precio promedio de los cortes vacunos.
Los cortes que más aumentaron fueron la nalga (13,6%), el cuadril (13,1%), la paleta (12,6%) y la carne picada común (11,3%). El asado, en comparación, subió un 9,9%. En contraste, el pollo entero solo aumentó un 0,4%, lo que podría llevar a los consumidores a optar más por esta alternativa.
Durante el primer bimestre de 2025, la faena acumulada fue de 2,171 millones de cabezas, representando una caída del 2,2% interanual. Aunque el sector cárnico enfrenta desafíos debido a la recuperación del rodeo y el impacto inflacionario en el consumo interno, la apertura del mercado chino y la mejora en los índices de preñez podrían ofrecer oportunidades para la estabilidad a mediano plazo.