La Cámara Textil de Mar del Plata apoyó el anuncio del gobierno nacional de dictar la no obligación de realizar aportes económicos a las cámaras empresariales y aseguró que la medida ayudará a combatir la informalidad laboral.
“El empleo en negro se genera por la altísima carga tributaria, esta es una medida correcta: desgrava para que no haya más empleo en negro”, celebró el presidente de la entidad, Guillermo Fasano.
El Gobierno nacional definió, a través de un decreto que se publicó el miércoles pasado en el Boletín Oficial, que las empresas ya no estarán obligadas a realizar aportes económicos a las cámaras empresariales. Esa práctica se había incorporado en algunos acuerdos colectivos y generaba controversia entre los empleadores.
“Es importante que se empiece a hablar de estas cosas -argumentó Fasano-. Hay que entender que si el empleado gana un millón de pesos, al empresario le cuesta 1.600.000”. A su entender, la medida significa “un primer paso en lo que buscamos. Estamos difundiendo lo costosos que son los salarios y lo poco que cobran nuestros obreros. Hace más de dos años que contamos la diferencia entre salario y costo salarial”.
Con el Decreto 149/2025, el Poder Ejecutivo Nacional apunta a modificar una situación que, según el texto oficial, carece de fundamento normativo: hasta ahora, varios convenios colectivos incluían cláusulas que imponían contribuciones obligatorias a favor de cámaras empresariales firmantes, exigidas incluso a empleadores que no están afiliados ni asociados a esas entidades.
Mejoras
Desde la entidad empresarial salieron a “respaldar” la medida porque significa “una simplificación y eliminación de tasas tributarias y es una desgravación del salario”, explicó el presidente.
Y detalló que de esta manera “se suprime el Instituto Nacional de Capacitación Profesional (Inacap). En 90 días la diferencia entre costo y salario se achica”.
“Va en la dirección correcta -añadió- para combatir el empleo en negro y premiar a los que están cumpliendo con la ley. El empleo en negro se genera por la altísima carga tributaria”.
El Inacap es financiado por un aporte mensual obligatorio de los empleadores, equivalente al 0,50 por ciento del salario inicial de un trabajador encuadrado en la categoría Maestranza “A”.
Actualmente, el sistema cubre a 1.200.000 trabajadores registrados bajo el convenio de comercio, generando un flujo de recursos estimado en $5.600 millones por mes y cerca de $70.000 millones al año.
El Inacap está gestionado por entidades gremiales empresarias como la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), que distribuye parte de los recursos entre cámaras sectoriales y regionales.
Finalmente, Fasano aseguró que “esperamos la discusión sobre aportes sindicales y cargos por obras sociales, jubilaciones, Inssp, fondo desempleo y AUH”.